MIEL DE ABEJA
Terapéutico nutricional. Posee mayor poder edulcorante que el azúcar y mejora la conservación de los alimentos.
Es suavemente laxante (regulariza el funcionamiento intestinal). Mejora el rendimiento físico, especialmente, en los deportistas. Estimula el vigor sexual.
También se utiliza para el tratamiento de faringitis, laringitis, rinitis, gripes, estados depresivos menores, gastritis, quemaduras, entre otras. Es utilizada para el tratamiento de personas que padecen astenia o estados de cansancio tanto en la esfera física como psíquica y en la desintoxicación de alcohólicos.
Su consumo tiene efectos positivos a nivel del corazón, ya que favorece la producción de fosfatos orgánicos que regulan el ritmo cardíaco.
En caso de tos, gracias a los monosacáridos, la miel tiene un efecto expectorante y antitusígeno. Por su parte, a las personas que sufren de ulcera gástrica se les aconseja tomar una cucharadita de miel pura en las mañanas, dejándola diluir bien en la boca antes de tragarla. La combinación de miel y jugo de limón también se recomienda para casos de fiebre, tomándose varias cucharaditas durante el día.
Escrito en Plantas Curativas
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