Plantas Curativas y Medicinales

Desde el inicio de la humanidad, las personas han utilizado a las plantas no sólo como alimento, sino como medicinas naturales. No se ha registrado tal vez la primera vez que se tomó una infusión o un preparado de hojas machacadas, pero a lo largo de la historia la humanidad ha tenido un enlace permanente con las plantas como suministro de salud. Las plantas fueron nuestras primeras farmacias.

Sin embargo, los avances científicos han traído medicinas más efectivas pero que sin embargo tienen sus contraindicaciones. Lamentablemente ninguna planta puede sustituir un fármaco, pero felizmente puede ayudarnos a combatir, aliviar y prevenir muchas enfermedades y males.

Millones de personas en el mundo confían en las propiedades de las plantas curativas y medicinales.

Trata las Varices con Ginkgo

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Escrito en Plantas Curativas

El ginkgo es un árbol único en el mundo, sin parientes vivos, de las semillas ginkgoaceae. Es un árbol alto, verde en verano, con copa coniforme muy ramificada. El tronco, muy erguido, llega a ser bastante grueso. Las hojas se disponen en espiral; son largamente pecioladas y con limbos muy variados. Tiene flores masculinas y femeninas. Las semillas son del tamaño de una ciruela, amarilla y carnosas en su interior.

En la composición del ginkgo biloba encontramos sobre todo compuestos flavonoides: rutósidos, quercetos, kenferol, derivados del quercetol, derivados del epicatecol y biflavonas del apigenol. Todos estos compuestos de nomenclatura tan complicada tienen en general un efecto vasodilatador cerebral y periférico, protector capilar, antivaricoso, venotónico, diurético, antiagregante plaquetario y fortalecedor de la resistencia capilar. Por todas estas acciones su uso está especialmente indicado en varices, fragilidad capilar, hemorroides, flebitis, hipertensión arterial, prevención del tromboembolismo y insuficiencia circulatoria cerebral como: vértigos, cefaleas, pérdida de memoria, etc. Es una planta especialmente recomendada en personas mayores, en las que una clara disminución de la funcionalidad del sistema circulatorio a todos los niveles.

También se utiliza el ginkgo para tratar determinadas secuelas de accidentes vasculares cerebrales y en traumatismo craneoencefálicos.  

INFUSIÓN
Se prepara añadiendo una cucharada pequeña de hoja de ginkgo a una taza de agua hirviendo. De est infusión se pueden tomar hasta 2 tazas al día.

EXTRACTO FLUIDO
Una vez preparado, se administran de 25 a 50 gotas, unas 3 veces al día.  

DECOCCIÓN
Se puede preparar manteniendo el agua hirviendo unos cuantos minutos. Se debe edulcorar con miel una vez frio, para rebajar el sabor amargo.

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